¿Para escribir? Un bolígrafo podía servir para eso en el pasado, pero en la actualidad, hay que pedirle mucho más. Descubre los cinco bolígrafos más polivalentes del mercado: desde cámara hasta reloj-láser.
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Reloj, cartera, gafas, y bolígrafo. Hay ciertos complementos que casi siempre llevamos encima y que pueden cumplir un cometido mucho más amplio que para el que fueron diseñados. Esta vez le toca el turno a los bolígrafos, que han perdido protagonismo en la era digital, pero que, como veremos, pueden servir para mil cosas... incluso para escribir.
Reivindica tu amor por la alta tecnología con estos cinco bolígrafos, que, sin ser extraordinariamente caros, sí que son verdaderamente curiosos y únicos.
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Todo en uno
Apropiadamente llamado "el bolígrafo friki", se trata de una estilográfica que viene dotada de una gran variedad de complementos que la convierten en una herramienta multiusos de gran utilidad (como mínimo curiosa lo es).
Se trata de un bolígrafo que incorpora, nada más y nada menos, que una punta "stylus" para utilizarla en una PDA, smartphone, o similar, un puntero laser rojo, luz ultravioleta para detectar billetes falsos (entre otras cosas), y una linterna led con brazo articulado para que podamos escribir por la noche sin ningún problema.
Disponible por menos de 10 euros, es todo un regalo.
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Comunicador visual
Moviéndonos una posición hacia arriba en la escala de lo curioso y bajando otra en la de lo útil, tenemos el LightTalk II, un dispositivo que nos permite comunicar mensajes cortos a largas distancias utilizando una fila de LEDs naranjas de alta visibilidad. Su funcionamiento se basa en la persistencia de la visión, que hace que se una imagen luminosa se quede impregnada en nuestra retina durante unos momentos.
Así, si agitamos el gadget, éste imprimirá en el aire una imagen que podemos escoger entre una base de datos de gráficos o textos prediseñados, o escanear cualquier dibujo y proyectarlo. Además, podemos enviar nuestros dibujos al LightTalk II de otro amigo.
¿Su precio? Unos 30 Euros.
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El copión
Pero si queremos lo último en alta tecnología para tomar apuntes, no podemos olvidarnos del Livescribe Pulse, un bolígrafo especialmente pensado para quien no puede detenerse a leer lo que ha escrito porque el profesor va a velocidad supersónica. Se trata de un dispositivo que digitaliza en tiempo real todo aquello que escribimos, pudiendo volcarlo en un ordenador a posteriori.
Cuenta con una memoria interna que puede llegar a los 2GB y un grabador de voz que podemos sincronizar con las notas tomadas a mano. De esta manera, podemos ir escuchando la narración del profesor mientras repasamos las notas que hemos realizado durante la clase.
Su precio, alrededor de los 120 Euros. Su valor para un estudiante, incalculable.
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Siempre en hora
Claro que si lo que queremos es presumir de reloj, este último caso no es muy recomendable, ya que necesitamos un ordenador para mostrar los resultados. Sin embargo, podemos impresionar a amigos y conocidos con el bolígrafo-reloj. No se trata de un simple reloj digital integrado en el bolígrafo (de eso ya teníamos en los 80, gracias), sino un puntero laser rojo que proyecta sobre cualquier superficie la hora.
Haz saber a todo el mundo qué hora es, quieran o no. Perfecto para enviar mensajes sutiles a la pareja sobre lo que está tardando en arreglarse, poner nervioso a propios y extraños durante un examen muy largo, o expresar nuestro descontento sobre lo larga y tediosa que es "El curioso caso de Benjamin Button". Lo dejo caer...
Además, su precio no supera los 5 Euros. ¿Se puede pedir más?
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El fisgón
Pero un bolígrafo también puede ser la herramienta más útil para un espía (ahora que están tan de moda... los espías, no los bolígrafos). En un diminuto cilindro de metal podemos integrar no sólo una cámara de vídeo en color y las baterías necesarias para alimentarla, sino también un radioenlace para emitir la imagen a unos 10 metros de distancia.
Ahora, cuando veas un bolígrafo estratégicamente posicionado hacia ti en una reunión, piénsatelo dos veces antes de decir algo de lo que te puedas arrepentir cuando lo veas en YouTube. Cuenta con una batería de litio integrada, una pantalla LCD receptora con grabador sobre tarjetas SD/MMC, y un cargador solar.
Su precio, de alrededor de 200 Euros, es pequeño cuando uno piensa la cantidad de vergüenza y carcajadas que podemos provocar.
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